¿Alguna vez has probado la pechuga de pollo guisada en salsa? Si no lo has hecho, deberías hacerlo. Esta receta es fácil de preparar y es una opción deliciosa para los días de la semana.
La pechuga de pollo guisada en salsa es una receta versátil que se puede servir con arroz, pasta o ensaladas. Se puede preparar con ingredientes básicos que probablemente ya tengas en tu despensa, como cebollas, ajo, jitomate, vino blanco y, por supuesto, salsa.
El primer paso es salpimentar la pechuga de pollo para darle sabor. Luego, debe cocinarse en una sartén con un poco de aceite. Después de unos minutos, agrega la cebolla y el ajo y cocina a fuego lento hasta que los ingredientes se ablanden.
A continuación, agrega el jitomate y el vino blanco y deja que la mezcla hierva. Cuando la salsa esté lista, agrega la salsa de tu elección y deja que la mezcla se cocine a fuego lento hasta que la salsa esté bien mezclada.
Cuando la salsa esté lista, vuelve a agregar la pechuga de pollo a la sartén y cocínala hasta que esté bien cocida. ¡Y listo! Tu pechuga de pollo guisada en salsa está lista para servir.
Esta receta es una opción fácil y deliciosa que seguramente se convertirá en una de tus favoritas. ¡Es una receta perfecta para comer en familia! No sólo es rápida de preparar, sino que la pechuga de pollo guisada en salsa es una comida nutritiva y sana. ¡A disfrutar!
Ingredientes para preparar pechuga de pollo guisada en salsa
Los ingredientes que necesitaremos para preparar esta deliciosa receta son muy sencillos y seguramente los encontramos en casa. Estos son: 2 pechugas de pollo, una cebolla, un pimiento rojo, un pimiento verde, un pimiento amarillo, aceite de oliva, harina, sal, pimienta y una lata de tomate frito.
Preparar la salsa para la guarnición
Para preparar la salsa de nuestra guarnición, comenzaremos limpiando los pimientos y la cebolla. Cortaremos los pimientos en juliana y la cebolla en cubitos. Luego, calentaremos una sartén con un buen chorro de aceite de oliva y, cuando esté caliente, añadiremos los ingredientes cortados. Dejaremos que se cocinen a fuego lento durante unos minutos hasta que los vegetales estén tiernos.
Una vez los vegetales estén listos, añadiremos la lata de tomate frito y salpimentaremos al gusto. Dejamos que la salsa se cocine durante unos 20 minutos, a fuego lento, para que se vaya reduciendo. Al final, removeremos la salsa con una cuchara de madera para que quede con una consistencia cremosa.
Preparar la pechuga de pollo
Una vez que tengamos lista nuestra salsa, pasaremos a preparar la pechuga de pollo. Para ello, comenzaremos lavando bien cada pechuga para que quede libre de impurezas. Luego, salpimentamos las pechugas y las pasamos por harina.
A continuación, calentaremos una sartén con un buen chorro de aceite y, cuando esté caliente, añadiremos las pechugas. Dejaremos que se doren durante unos minutos a fuego medio para que se cocine por dentro.
Una vez que la pechuga esté lista, la retiramos de la sartén y la colocamos en el plato de servir. Por último, cubriremos la pechuga con la salsa que hemos preparado previamente y serviremos.
Ya tenemos lista nuestra deliciosa receta de pechuga de pollo guisada en salsa. Esta receta es un plato sencillo y muy rico, ideal para servir a nuestros familiares y amigos.
Consejos para hacer la mejor pechuga de pollo guisada en salsa
- Comenzando por la compra de pollo, busca siempre comprar carne de la más alta calidad posible, para que la receta salga con el mejor sabor.
- Al preparar la pechuga de pollo, asegúrate de cortarla en trozos pequeños para que se cueza más rápido y se mantenga más jugosa.
- Una vez que esté listo para cocinar, añade aceite de oliva al fondo de la olla y deja que se caliente antes de agregar la pechuga de pollo, para que se dore bien.
- Para obtener una mejor consistencia, agregue una cucharada de harina para ayudar a espesar la salsa.
- No hay que olvidar que la salsa debe tener mucho sabor, por lo que debe agregar una buena mezcla de especias como ajo, cebolla, sal, pimienta y tomillo.
- Procura dejar la pechuga de pollo cocinando a fuego lento para que se cocine bien, hasta que la salsa tome un tono oscuro y espeso.
- Finalmente, para añadir un toque de sabor, puedes agregarle unas gotas de limón al final del proceso de cocción.